jueves, 10 de diciembre de 2020

Colimación con chesire

En este post, voy a intentar explicar como colimar nuestro telescopio reflector de la manera más sencilla con un colimador cheshire.

Ya sabemos que  el colimador cheshire, es barato, y no depende de pilas para su funcionamiento, por lo que es un indispensable en nuestro equipo. Podemos tener un colimador láser, pero nunca está de más tener un cheshire, y aprender a usarlo.

El cheshire, se coloca en el portaocular de nuestro tubo. Una vez colocado, nos encontraremos con que arriba tiene un agujerito muy pequeño (visor), y en un lateral una ventana oblicua, que debe orientarse hacia la luz para iluminar por dentro nuestro colimador. Dentro de el nos encontraremos una cruceta de hilo metálico.

partes de un colimador cheshire

Una vez colocado nuestro colimador, permitiremos que le llegue luz a la ventana oblicua, y acercando nuestro ojo al agujerito superior, si está descolimado nos encontraremos con algo así:

telescopio descolimado

La colimación se realizará desde el ojo hacia afuera; es decir, ajustamos primero el espejo secundario, y luego el primario. Con una llave allen giraremos los tres tornillos de ajuste del espejo secundario, que se encuentran en la boca del telescopio, y mirando por el agujero del cheshire llevaremos el "rosco" al centro de la cruceta centrándolo lo mejor que podamos. Si es necesario, aflojaremos unos tornillos, y apretaremos otros hasta llevar el rosco al centro de la cruceta. NUNCA FORZAREMOS LOS TORNILLOS.
Aviso: Nunca tocaremos el tornillo central, ya que desplazaríamos el espejo secundario.

tornillos del espejo secundario

Debe quedar así:

rosco centrado en la cruceta


Ahora ajustaremos el espejo primario. Aflojaremos los tornillos de freno que se encuentran en la parte posterior del telescopio, y girando los tornillos de ajuste, llevaremos el punto negro hasta el centro del rosco (y por consiguiente, también al centro de la cruceta) por el método de ensayo/error hasta obtener un ajuste igual que el de la imagen inferior.

tornillos del espejo primario

telescopio colimado


Una vez que tenemos nuestro telescopio colimado, toca asegurar los tornillos de freno del espejo primario. Esta operación la haremos con cuidado, e iremos apretando de uno en uno y poco a poco los frenos, ya que si lo hacemos de golpe podemos descolimarlo de nuevo. Una vez que tengamos el equipo asegurado, ya podremos disfrutar de imágenes nítidas y claras del cielo.

Como podéis ver, no es tan complejo como parece, y es que la primera vez que nos enfrentamos a la colimación creemos que vamos a meter la pata, o que vamos a estropear el telescopio.
Es una operación sencilla, y es un mantenimiento básico de nuestro tubo reflector.

Espero que os haya servido de ayuda. Buenos cielos.


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